
Mi amado no me ama,
Se aleja,
Desaparece,
Se considera inexistente,
Ocasionalmente perverso,
Para llevarme al metaverso,
Lo ha hecho,
Sin
ningún despecho,
Crea
tácticas diferentes,
Que
no son elocuentes.
Si no
quiere mi amor,
Una solución fácil surgió.
Dejaré esparcido mi amor,
Sin
rumbo fijo.
Alguien
llegará,
Con
honor,
Se lo
puede llevar,
Mientras,
En el aire
permanecerá,
Mezclado por el
oxigeno,
Lo respirará.
Se podrá enamorar,
Para ese día,
El encuentro se
tornará,
No existirá nada
qué pensar,
Sólo me amará,
Y se llenará de
felicidad.
*No sabía que
escribir, y con una conversación, este poema surgió, gracias: José Piñeiro
Castro